Es un gusto saludarles, este estudio es para aclarar algunas
dudas sobre el tema del movimiento g 12 ,
un nuevo movimiento que promete prosperidad y crecimiento, un nuevo gobierno
cristiano que pretende tener control total
de la doctrina, estudiaremos este tema y
cada uno puede hacer sus propias conclusiones, no tenemos la intención de generar
controversia pero si es
nuestra obligación mostrarles a la luz
de la biblia, lo que está pasando
en el mundo. Reconociendo que estamos en tiempos difíciles y el conocimiento y el estudio de la biblia nos ayudara a no ser engañados, pues conoceréis
la verdad y la verdad os hará libre.
1 Corintios 3:11-21
Porque nadie puede poner otro fundamento que el que está
puesto, el cual es Jesucristo.
Y si sobre este fundamento alguno edificare oro, plata,
piedras preciosas, madera, heno, hojarasca,
la obra de cada uno se hará manifiesta; porque el día la
declarará, pues por el fuego será revelada; y la obra de cada uno cuál sea, el
fuego la probará.
Si permaneciere la obra de alguno que sobreedificó, recibirá
recompensa.
Si la obra de alguno se quemare, él sufrirá pérdida, si bien
él mismo será salvo, aunque así como por fuego.
¿No sabéis que sois
templo de Dios, y que el Espíritu de Dios mora en vosotros?
Si alguno destruyere el templo de Dios, Dios le destruirá a
él; porque el templo de Dios, el cual sois vosotros, santo es.
Nadie se engañe a sí mismo; si alguno entre vosotros se cree
sabio en este siglo, hágase ignorante, para que llegue a ser sabio.
Porque la sabiduría de este mundo es insensatez para con
Dios; pues escrito está: El prende a los sabios en la astucia de ellos.
Y otra vez: El Señor conoce los pensamientos de los sabios,
que son vanos.
Así que, ninguno se gloríe en los hombres; porque todo es
vuestro:
Iniciamos el estudio.
En estos tiempos finales, previos a la venida del Señor
Jesucristo a por su Amada, cuando la resurrección de los muertos en Cristo
tendrá lugar, y los vivos en Él seremos transformados, y juntamente con ellos,
seremos arrebatados para ir a recibir al Señor en las nubes (1 Tesalonicenses.
4- 13-18), 13 .Tampoco queremos, hermanos, que ignoréis
acerca de los que duermen, para que no os entristezcáis como los otros que no
tienen esperanza.
Porque si creemos que Jesús murió y resucitó, así también
traerá Dios con Jesús a los que durmieron en él.
Por lo cual os decimos esto en palabra del Señor: que
nosotros que vivimos, que habremos quedado hasta la venida del Señor, no
precederemos a los que durmieron.
Porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel,
y con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo
resucitarán primero.
Luego nosotros los que vivimos, los
que hayamos quedado, seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes para
recibir al Señor en el aire, y así estaremos siempre con el Señor.
Por tanto, alentaos los unos a los otros con estas palabras.
Justamente en estos momentos, es cuando un amplio sector
eclesial avanza hacia una dirección contraria a la de la Iglesia que está
preparada y esperando el Advenimiento del Señor. Nos preguntamos por qué.
El enemigo de nuestras almas sabe que le queda poco tiempo. Él
se ha fijado dos metas, las cuales está intentando desaforadamente llevar a
cabo. La primera es conseguir que el máximo de cristianos se queden en tierra
cuando el Señor venga a por Su remanente.
La segunda es, levantar la falsa iglesia mundial de la
Bestia Anticristo, dirigida por el Falso Profeta (Apocalipsis. 13). Esto último
puede sonar muy extraño para algunos, pero no deja de ser menos cierto.
Para ello, el diablo, a través de sus agentes, que son
muchos; muchos miles en todo el mundo, ha ideado diferentes estrategias, sobre
todo a lo largo de los últimos años. De cara a la Iglesia, casi todas ellas
suenan a priori muy escriturales, y no obstante, con la excusa de “bajar el
Cielo a la tierra”, han sido levantadas para a la postre alentarla a poner sus
ojos en los valores y conceptos de este mundo.
En los ámbitos evangélicos, existe un anhelo, a veces muy
exagerado en los pastores y membresía en general, por ver un crecimiento
numérico, así como un aumento de los recursos económicos en las iglesias. No
hay nada de malo en desear ese crecimiento, siempre que todo sea hecho conforme
a la voluntad de Dios, y no sea impulsado por la carne.
Ahora bien, mi preocupación se centra en el engaño
susceptible de ser creído por todos aquellos pastores y cristianos en general,
que, bien por ignorancia, o por codicia, se deciden a abrazar esas estrategias,
que no son las del Espíritu Santo. Por lo tanto, nos convendrá analizar y
aprender acerca del asunto para no ser engañados, o para dejar de lado todo
error que hayamos creído.
En todas estas estrategias del diablo, existen diversos puntos
en común, por cierto muy basados en el antiguo gnosticismo, por lo tanto,
cargados de iluminismo y de misticismo. Veamos algunos de ellos:
(1), Una exclusivista y supuesta “nueva” revelación de parte
de Dios sobre la que se basa ese nuevo movimiento o modelo.
(2). Esa nueva revelación mencionada, que conlleva toda una visión.
(3). Esa visión conlleva su “espíritu”, que es el que da el
poder para implementarla.
(4). La visión, ineludiblemente pretende llevar a la iglesia
que adopta el modelo, al éxito total.
(5). Supuestamente, toda la verdad de Dios está concretizada
en la visión, porque la visión, dicen, es de Dios.
Sobre todo, el punto de inflexión es la exaltación del
crecimiento numérico por encima de muchas consideraciones, que llegado el
momento, sería importante tener en cuenta desde una perspectiva puramente
bíblica.
No obstante, el fruto que a la postre se genera es, entre
otro: Ceguera, orgullo, división y ruptura; camino a la apostasía para muchos;
en el proceso, todo ello impregnado de euforia y sentido triunfalista.
El Gobierno de los doce, en cinco puntos.
De entre todas esas estrategias o movimientos que existen,
el que destaca en estos días sobremanera es el llamado G12, abreviatura para el
“Gobierno de Doce” o “Gobierno de los Doce”. Por lo tanto nos detendremos en
este artículo, hablando de él.
Efectivamente, el G12, fundado por César Castellanos
Domínguez y su esposa Claudia Rodríguez de Castellanos, ambos políticos
colombianos muy destacados, y también dirigentes de una enorme congregación neo
pentecostal carismática de tendencia ecumenista, llamada Misión Carismática
Internacional, de Bogotá, Colombia, como poco, cumple perfectamente con los cinco
puntos anteriormente citados. Por lo tanto, pasemos a analizarlos uno por uno
1 - Una exclusivista y supuesta nueva revelación de parte de
Dios sobre la que se basa ese nuevo modelo
César Castellanos, asegura que Dios mismo le dio a conocer
una nueva revelación, y de forma exclusiva; el “eslabón perdido”, según él, la
manera de Dios para llevar al éxito total a la Iglesia de Jesucristo en estos
días. El mismo lo narra así: <<Clamé al Señor: “Señor, necesito algo que
pueda acelerar el crecimiento de la congregación”, y el Señor me mostró el
concepto ahora llamado G12, es decir el Gobierno de los doce>> 1
Esa revelación es absolutamente de corte doctrinal
fundamental. Según castellano, esa revelación del “gobierno de los doce” es
necesaria e imprescindible para que Dios traiga el nuevo y espectacular
avivamiento mundial para estos últimos tiempos.
Por otra parte, ya que Dios le dio esa llave a castellano de
forma personal y en exclusiva, eso haría de César Castellanos el profeta y
apóstol por antonomasia de la Iglesia en estos días.
No obstante, esa revelación novedosa que Castellanos dijo
recibir de parte de Dios, no puede ser tal, ya que el Señor no se contradice,
cuando la misma Palabra escrita nos asegura que no se puede añadir ni quitar
nada a la misma.
Curiosamente, esa revelación del número 12, la recibió
anteriormente el fundador del Opus Dei, Javier Escrivá de Balaguer, quien
empezó su movimiento siendo él el líder de doce.
No es descartable en absoluto, la vinculación entre el G12 y
la iglesia católica romana. Para ello, búsquese bien, porque existe suficiente
información, fruto de ulterior investigación.
2- Esa nueva revelación mencionada, conlleva toda una visión
De la revelación, procede la ulterior visión. La visión es
ya el desarrollo del concepto, en este caso, el concepto de gobierno
eclesiástico/espiritual / terrenal, basado en el número “doce”.
El G12 propone estructurar toda su organización sobre el
número 12, aduciendo que el secreto está en el número 12, y que organizándose
de ese modo, las iglesias que siguen esa visión, y están guiadas por el
“espíritu” de esa visión, obtendrán un crecimiento numérico sin precedentes.
Según Castellanos, <<En el reino espiritual existe el
grupo de 12 que nos da autoridad, gobierno y madurez al completo…>> 2 En
un supuesto “reino espiritual”, del cual Castellanos no precisa su procedencia,
dice existir un “grupo de doce” que concede todas esas gracias y virtudes que
el autor menciona. Si lo que pretende es decirnos que la base de todo esto es
un planteamiento numérico, en este caso, el del número doce, no tenemos aquí
otra cosa sino simple y llana numerología *
* (La numerología es una ciencia oculta de adivinación, que
busca la interpretación esotérica de las cosas que nos rodean por medio de los
números. Dícese que los números claves contienen verdades poderosas acerca de
los aspectos positivos y negativos de la verdadera naturaleza y del destino)
3- Esa visión conlleva su “espíritu”, que es el que da el
poder para implementarla
Efectivamente, esa visión del G12, conlleva su propio
“espíritu”, que es el que da el poder. Ese espíritu le llama castellano, el “espíritu
de la visión”. Aquí ya nos damos de bruces directamente con el mundo
espiritual, ya que estamos hablando de “espíritu”.
En el mundo espiritual, sólo existen dos fuentes u orígenes
de espíritus: De Dios, o del diablo. Veamos entonces de que trata aquí el
asunto, porque si la visión aludida no es de Dios, entonces hemos de concluir
que el espíritu de la misma tampoco lo es.
No obstante, leemos así por parte de un seguidor del G12:
<<El "Espíritu de la Visión", está relacionado con la relación
pública del creyente con el reino de Jesucristo. El reconocimiento y sujeción
al orden establecido, a la autoridad y al gobierno apostólico y
profético>> 3
Así que, como podemos ver, el “ espíritu de la visión ” nos
lleva a sujetarnos a una jerarquía imaginaria en la verdadera Iglesia de
Cristo, formada por supuestos apóstoles y profetas; aquí tenemos otra vez
“Reino Ahora”, es decir, “Teología del Dominio”; por demás, puro y llano
catolicismo romano.
Pero el “espíritu de la visión” de G12 es más que eso. Los
pastores interesados en G12, son convencidos para que viajen a Colombia a
recibir el “espíritu de la visión”. Cuando eso ha sucedido, vuelven a sus
países de origen y a sus congregaciones, y eufóricos, imparten a toda la
congregación lo que han recibido: El “espíritu de la visión”; y ya están bajo
el influjo de ese espíritu, que obviamente, no es el bendito Espíritu Santo.
4- La visión, ineludiblemente pretende llevar a la iglesia
que adopta el modelo, al éxito
La pregunta que primero debemos hacernos es, ¿Cuál es el
concepto bíblico del éxito? La respuesta inmediata es, el “agradar a Dios,
cumpliendo cada uno con Su voluntad”.
No obstante, el concepto de éxito del G12 es otro muy
distinto. Castellanos entiende que el éxito radica en lo siguiente, tal y como
él mismo lo define: <<Implementar el modelo de los doce implica abandonar
lo tradicional y lanzarse a conquistar un mundo totalmente diferente, pero
efectivo porque a través de él, el crecimiento está garantizado…>> 4.
Parte de la visión de G12, es abandonar lo tradicional, es
decir, lo que siempre ha sido hacer iglesia, y “conquistar un mundo diferente”.
Este tipo de lenguaje secularizado de conquista y dominio es muy típico en el
G12. También nos habla de que el crecimiento numérico está garantizado. Este
último, principalmente, es el concepto de éxito.
Parece ser que lo que prima aquí es el crecimiento numérico.
Ese es el concepto de ÉXITO de los que piensan así. No tienen en cuenta que el
mismo diablo puede sin problema alguno llenar las congregaciones de gente sólo
en apariencia piadosa, causando así un estropicio grande a la larga en esa
iglesia (1 Juan. 5: 19b). Eso no es en absoluto nuevo, ya ocurrió al inicio de
la iglesia católica, cuando los templos cristianos se llenaban de gente de todo
tipo a partir del emperador Constantino. El mismo Agustín de Hipona se quejaba
de ello en el siglo IV de nuestra era, y decía así: <<El hombre que entra
en la iglesia está forzado a ver borrachos, avaros, truhanes, jugadores,
adúlteros, fornicarios, gente llevando amuletos, clientes asiduos a los
adivinos y a los astrólogos...Debe saber y estar avisado, que las mismas multitudes
que se amontonan para entrar en las iglesias para los cultos cristianos, son
las que llenan los teatros de las fiestas paganas>>.
Los defensores del G12 dirán que esto no ocurre en sus
iglesias, pero no saben que en los orígenes de lo que hoy conocemos como la
iglesia de Roma todavía no se daba el caso, sino que empezó a ocurrir poco
después.
Pero, la palabra ÉXITO, que tanto emplea el G12, es una
palabra básicamente secular, como por ejemplo, la palabra felicidad, de corte
griego y latino. Sólo cuatro veces aparece en la Biblia, en el A.T. y nada que
ver con el concepto de crecimiento numérico (1 Samuel. 18: 30; 1 Reyes. 22: 13;
Nehemías. 1: 11; Deuteronomio. 11: 17)
La Palabra dice que es el mismo Dios el que añade a la
iglesia los que tienen que ser salvos (Hechos. 2: 47). Concluimos diciendo que
el crecimiento numérico de una congregación, no es necesariamente señal de
bendición divina, y por lo tanto, no debería ser la meta final y suprema de
ninguna iglesia o movimiento cristiano, sino más bien el buscar de veras el agradar
a Dios, según el más puro afecto de Su voluntad.
5. Supuestamente, toda la verdad de Dios está concretizada
en la visión, porque la visión, dicen, es de Dios
En el caso del G12, es más que obvio que ese es el caso. En
la página web de la catedral de Elim, de G12. Escribe José Ferrada:
<<La "Visión Celular", es una Visión
entregada por Dios al pastor César Castellanos de la ciudad de Bogotá, Colombia,
a fin de vivificar la Iglesia del tercer milenio, y ayudarla a ser tanto y más
fructífera y próspera de lo que fue la iglesia del primer siglo. Pastoreando
una iglesia de ciento veinte mil personas, el reverendo Castellanos tiene la
experiencia y el testimonio suficiente para decirnos qué hacer para ver nuestras
congregaciones prosperadas >
Según dice Ferrada, un hombre, este es, el fundador de G12,
tiene la autoridad y mensaje en exclusividad de parte de Dios para “decirnos
qué hacer para ver nuestras congregaciones prosperadas”. En otras palabras,
debemos hacer lo que ese hombre dice, porque supuestamente lo dice de parte de
Dios, pero, ¿No contradice todo esto los principios de la misma Palabra, cuando
dice que no debemos confiar en el hombre, ni en la supuesta verdad que trae
consigo? (Jeremias.17: 5)
La Palabra nos enseña que, así como Dios habló a Su pueblo
en el tiempo del Antiguo Pacto a través de los profetas; en este tiempo, Él nos
ha hablado a través de Su Hijo (Hebreos. 1-1, 2). El canon de la Biblia está
cerrado, y no se puede formular doctrina ni dogma extra bíblicos. Si así se
hace, se cae en el error y en el engaño.
Y no obstante, el mismo Castellanos, implícitamente le da a
su revelación y visión una autoridad similar a la de la propia Biblia, cuando
insiste diciendo: <<El modelo de los doce es muy celoso, o se toma en su
totalidad, o no; no hay término medio>> 5.
Démonos cuenta que sólo de la Biblia no se puede ni añadir
ni quitar nada, y sin embargo, esto mismo dice castellano referente a su modelo
del G12.
La verdad sobre el 12.
El diablo es especialista en sacar las verdades de su
contexto y, extrapolándolas, hacer que se vuelvan mentiras. Eso mismo ocurre
con el concepto del doce. Bíblicamente, el número doce es sinónimo de
perfección de gobierno. De ahí las doce tribus de Israel, las doce puertas de
la ciudad de la nueva Jerusalén, los doce nombres de los doce apóstoles del
Cordero (Apocalipsis. 21: 11-14). Esto no se pone en duda.
Pero el doce, como número de perfecto gobierno, sólo es
atribuible a Dios. Solamente Él tiene la capacidad atributiva de poder dar
forma y establecer ese gobierno, el cual llamamos Teocracia. Tal gobierno
tendrá lugar cuando el Rey Jesucristo vuelva en gloria y establezca Su Reino en
esta tierra; lo que llamamos el Milenio (Apocalipsis. 20); previamente la
Iglesia habrá ya sido glorificada.
Pretender adelantar el Milenio a nuestros días, enseñando
que el Reino es Ahora, cuando Cristo todavía no ha vuelto todavía, y
estableciéndolo todo basándose en el número doce, número de gobierno perfecto o
teocrático, es la labor del diablo y de los que se dejan engañar por él.
Escucha bien, hermano, si la Iglesia en este tiempo debe
organizarse necesariamente de a 12, ¿quién osará ocupar el lugar de Jesús?...
Quien así ose, es anticristo.
Meditando sobre todo esto, llegamos a la firme conclusión de
que existe, implícita una reacción en cadena: Cuando la revelación es falsa, la
visión es falsa también, el “espíritu” es falso, la meta es falsa, y la
supuesta verdad es también falsa.
Alguien aquí me dirá que hay verdad en la enseñanza del G12.
Por supuesto que en el G12 hay verdad escritural, porque, ¿cómo se podría
engañar sólo con mentiras?, es necesaria cierta verdad, dándole el tinte
cristiano necesario; pero el tinte no conforma toda la realidad, sólo la
apariencia. No nos engañemos.
Apelando al ego y a la carne
Huyamos de los modelos falsos, que sólo intentan apelar al
ego y a la carne. Castellanos, exaltando su visión del “gobierno de los doce”,
dice lo siguiente: <<Cuando alguien descubre el poder y la autoridad que
pueden ser desarrollados siendo líder de doce personas, entonces se preocupa
por capacitarse, comprometerse, y por conseguir también sus doce>> 6
Vemos que, según Castellanos, la motivación para capacitarse y comprometerse es
para llegar a tener “poder y autoridad”. Vemos que la motivación aquí no es la
de servir, sino la de tener “poder y autoridad”, llamándole a todo esto:
“Éxito”. Es decir, mucha gente llenando los templos, y muchos líderes
ejerciendo “poder y autoridad” sobre muchos. Así se sucumbe ante la tentación
del diablo. ¡Cómo me recuerda esto al catolicismo romano de siempre!
Mejor, vayamos a la simplicidad y eficacia de la Palabra de
Dios, la Biblia, y no nos movamos de ahí, huyendo de toda tentación de
megalomanía.
En tus manos está tu destino y la de tu familia.
Cuando tengas dudas de algo
busca las respuestas, investiga, consulta, pregunta, busca en la biblia y no te quedes con dudas, pues
el espíritu santo es quien convence y enseña la verdad de Dios.
Gracias nos veremos
en el próximo estudio.
Excelente blog! Felicitaciones te doy, delatnte de Dios Padre.
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